Cinco años sin Don Amado

Para los zapatistas, “fue un oído atento y respetuoso para el dolor de los indígenas chiapanecos aún antes del amanecer de la guerra contra el olvido, escuchó cuando la mayoría estaba sorda y miró cuando muchos estaban ciegos.

Luis Hernández Navarro lo describió así: “Incómodo tanto para el poder como para la izquierda partidaria, hizo de su vida un elogio a la ética, a la valentía, a la tenacidad, a la resistencia… Su vida muy bien puede convertirse en un capítulo más en el libro Arcángeles, de Paco Ignacio Taibo II.

Adolfo Aguilar Sinzer lo consideraba: “un ser humano dotado de una inmensa bondad, de un intelecto simple e incisivo y de convicciones e ideas expuestas con modestia y humildad y defendidas en la práctica cotidiana de su existencia, con grandeza y valentía”.

Hoy Don Amado Avendaño Figueroa, abogado de profesión, periodista de oficio y político por accidente cumple cinco años de haberse convertido en inmortal.

Es uno de esos chiapanecos que nunca necesitará de una calle, un parque, un premio o un monumento para ser recordado.

Honrar su memoria es honrar a miles de chiapanecos y mexicanos que como él, pero en el anonimato, continúan luchando por la libertad, la democracia y la justicia que tanta falta le hace a Chiapas.

(Este año no habrá misa)